TRAUMATOLOGÍA
DR. JAVIER DE LA FUENTE
TRAUMATÓLOGODR. FERNANDO DÁVILA
El diagnóstico médico establece qué enfermedad o lesión padece una persona a partir de síntomas, signos y hallazgos de exploraciones complementarias como las pruebas de imagen.
Se trata de un complemento a la valoración realizada por el fisioterapeuta en nuestra clínica, en la cual se le da al paciente un diagnóstico concreto de su lesión por parte de un traumatólogo especialista en ecografía y en cirugía ortopédica.
Además, se proporciona al paciente una explicación del tratamiento conveniente, siendo éste un tratamiento que el propio traumatólogo puede realizar en el momento, o una explicación y planificación de una posible cirugía en los casos que la lesión así lo requiera.
Por su fácil acceso e inmediatez, la ecografía se ha convertido en la técnica de diagnóstico, prevención, guía al tratamiento y seguimiento de referencia.
La ecografía musculoesquelética es una de las pruebas de imagen en las que el traumatólogo se apoyará en la misma consulta para llegar al diagnóstico médico concreto. Además de las pruebas de imagen que el paciente pueda aportar como radiografías o resonancias magnéticas, el traumatólogo especialista en ecografía realizara está técnica al momento para poder establecer un diagnóstico específico.
Además de utilizar la ecografía como método diagnóstico, el médico se apoya en ella para realizar diversos tratamientos ecoguiados, tales como infiltraciones, aspiraciones de derrames o lavados de calcificaciones de una manera exacta, específica y segura.
El concepto de infiltración define la inyección de un medicamento en una articulación o en tejidos blandos para que actúe directamente sobre la zona afectada en procesos dolorosos o inflamatorios.
Es indispensable el uso de la ecografía para el guiado de las infiltraciones porque permite visualizar la aguja en tiempo real y controlar el punto a infiltrar.
Los productos infiltrados se dividen en varios grupos dependiendo del tipo de medicamento:
- Medicamentos esteroideos. Su finalidad es antiinflamatoria.
- Medicamentos anestésicos. Su finalidad es la disminución inmediata del dolor.
- Ácido Hialurónico. Restaura la viscoelasticidad protectora del líquido sinovial de las articulaciones, reduciendo la fricción y mejorando la movilidad articular.
Las lesiones más frecuentes en las que se usan estas técnicas de infiltración son:
- Artrosis de diferentes articulaciones (cadera, rodilla)
- Inflamaciones de articulaciones
- Bursitis subacromial
- Bloqueos neurales
El procedimiento de aspiración o drenaje de un derrame se realiza cuando el cuerpo presenta un fluido o derrame exagerado y este supone dolor para el paciente o una importante ocupación de espacio entre las estructuras del cuerpo. Este fluido se aspira mediante una aguja que entra al punto exacto donde se ha generado dicho derrame.
Es indispensable el uso de la ecografía para el guiado de las aspiraciones porque permite visualizar la aguja en tiempo real, consiguiendo así controlar el trayecto y proceso de la aspiración y localizar con exactitud el punto a drenar.
Los derrames y sus respectivas aspiraciones pueden ser de varios tipos y estos son los más frecuentes:
- Derrame articular de líquido sinovial (típico en rodillas).
- Derrame de seroma en roturas del gemelo interno.
- Derrame hemático o de sangre en roturas de fibras encapsuladas.
- Derrames de Morel-Lavallée post traumáticos.
- Quistes sinoviales y gangliones.
La técnica del lavado ecoguiado de las calcificaciones de hombro consiste en la colocación de una aguja bajo anestesia local en el centro de la calcificación, de tal forma que mediante la inyección a presión de suero salino o anestésico se rompa la calcificación y se vacíe el material cálcico a la jeringa utilizada para el lavado. Las calcificaciones más frecuentes se dan en el tendón supraespinoso.
Es indispensable el uso de la ecografía para el guiado de los lavados de calcificación porque permite visualizar la aguja en tiempo real, consiguiendo así controlar el trayecto y proceso de la aspiración y localizar con exactitud el punto a tratar.
El tratamiento de Plasma Rico en Plaquetas (PRP) es una innovadora terapia médica que utiliza los propios componentes sanguíneos del paciente para promover la curación y la regeneración de tejidos.
El PRP es un concentrado de plaquetas y factores de crecimiento obtenido a partir de la sangre del paciente. Se extrae una pequeña cantidad de sangre, se centrifuga para separar los componentes y se obtiene así un plasma con una concentración elevada de plaquetas, que son fundamentales para la cicatrización y la regeneración de tejidos.
Una vez obtenido el PRP, se infiltra en el área de lesión. Las plaquetas liberan factores de crecimiento que estimulan la reparación de tejidos dañados, promueven la formación de nuevos vasos sanguíneos y reducen la inflamación, lo que conduce a una mejora en la función y la apariencia del área tratada.
Patologías más frecuentes para su uso:
- Artrosis de Rodilla
- Artrosis de Cadera
- Tendinopatía Rotuliana
- Tendinopatía Aquílea
- Epicondilitis
- Fascitis Plantar